Suiza es un paraíso para los amantes de la naturaleza y para descubrir en bici. Además, Suiza ofrece una gran oferta cultural y gastronómica pasando por sus pueblos atípicos y sus ciudades elegantes y animadas. Con más de 12.000 km de carriles bici señalizados: Suiza es todo un placer para viajar en bicicleta.Suiza es sinónimo de enormes montañas, increíbles desfiladeros, bosques intensos, lagos de águas cristalinas y cascadas rugientes. Pero tiene también una cultura interesante y variada con su música folklórica cómo el canto de la tirolesa o el cuerno alpin y, con su gran oferta gastronómica desde sus quesos alpinos y sus chocolates hasta sus 40 variedades de vino. En Suiza se hablan cuatro idiomas así como numerosos dialectos pues las numerosas tradiciones regionales se enfrentan a sólo pocas costumbres nacionales.
Se puede montar en bicicleta en todo el pais, del lago Lemán a La Gruyère, donde la leyenda de chocolate Cailler le hace competencia al legendario queso. Desde Gstaad al entorno de ensueño de los lagos de Thun y de Brienz. Por el impresionante paisaje sobre el Brünig al lago de Lucerna y a Lucerna misma, y posteriormente al pueblo de peregrina- ción de Einsiedeln. A lo largo de los lagos de Zúrich y de Walen llega finalmente al amplio valle del Rin y, en ruta directa, al lago de Constanza.
El cantón de Vaud está ubicado directamente en la región del lago Lemán, extendiéndose desde el apacible Jura hasta los fascinantes Alpes del Vaud, a lo largo de lagos puros y majestuosos, integrados idílicamente en el paisaje. Recorre en bicicleta uno de los mayores ríos europeos desde Oberwald hasta Ginebra y descubre el río Ródano y el lago Lemán hasta Ginebra con nuestro viaje. La ruta es mayormente llana con algunas subidas, ¡paso obligatorio para disfrutar de unas vistas increíbles!
El cantón de Vaud está ubicado directamente en la región del lago Lemán, extendiéndose desde el apacible Jura hasta los fascinantes Alpes del Vaud, a lo largo de lagos puros y majestuosos, integrados idílicamente en el paisaje. Las colinas de los viñedos se extienden de forma elegante hasta las orillas del lago Lemán. Es una región entre sueño y realidad, y no obstante, muy arraigada. La pequeña e idílica ciudad de Nyon se halla a orillas del Lago Lemán a la mitad del camino del camino entre Ginebra y Lausana en los viñedos de La Côte. Ofrece muchas excavaciones y monumentos de la época de los helvéticos y los romanos así como de la Edad Media son testimonio de su agitada historia. En una bahía protegida del Lago Lemán, cercado por viñedos y ante el espectáculo escenario de los Alpes cubiertos de nieve, se halla la cuidad animada de Montreux. Lausana, la segunda ciudad en el Lago Lemán, combina el aire de una ciudad mercantil dinámica con la ubicación idílica de un centro turístico. La capital Lausana se halla en un emplazamiento privilegiado, gozando de una vista hermosa de los Alpes Altos. Entre los picos cercanos de los Alpes y la cordillera de los colinos del Jura se halla la ciudad de Ginebra, de habla francesa, en la bahía en la que el Ródano sale del Lago Lemán. La sede europea de la ONU y sede principal de la Cruz Roja se llama también “capital de la paz”, combinando una tradición humanitaria con un aire cosmopolita.